culto a la santa muerte

Mucho Se ha hablado sobre esta imagen, que representa para unos una nueva forma de religión, mientas que para otros es una perversión, y para otros es el resurgimiento de la vieja tradición prehispánica. Tratare de hacer un recorrido desde los inicios de culto, Se cree que la santa muerte nació en la era prehispánica, hay creencias donde era llamado el dios de la muerte o el dios descarnado, se le adoraba en días dedicados a ella dándole ofrendas sacrificando desde animales hasta personas pensado que con esto iban a poder descansar en paz.  Pero en estos tiempos la muerte es considerada como una santa, una presencia femenina, a la que se le ofrenda cigarros, veladoras, puros, asunto que recuerda a los cultos de Chiapas o a los de los de Cuba. A la imagen, además de su rostro de calavera, la reconocemos por portar una guadaña en una mano. Algunos cintan que con esta arma se representa el poder de corta la unión que riene el alma con el cuerpo a través de un hilo de plata. Otro de los motivos importantes de su iconografía es que se le viste de diferentes colores, y cada uno representan un deseo o motivo de peticiones: por ejemplo, el amarillo para el dinero, azul para la salud los estudios y la verdad, blanco para el bien y la lealtad; el negro para la brujería,  Entre los mismos creyentes no hay coherencia ni claridad sobre estos tema ya que se contradicen, además de que se encontró que el crecimiento del culto se dio más durante las epidemias de viruela y la llamada muerte negra a mediados del siglo XIX.  Desde el siglo XIX hasta el día de hoy el culto a la “santa Muerte” ha ido en aumento. Han aparecido capillas y lugares de culto en sitios como Tepito en la ciudad de México o en Culiacán, Sinaloa. Lugares donde la gente va a cumplir sus mandas. Ya que las religiones establecidas han perdido su credibilidad o su capacidad de establecer entre sus fieles una conección con la vida y la muerte, y ahora la gente busca algo que resuelva sus demandas, espacio que podría ser ocupado por otras religiones (como los cultos de la santeria cubana) o por la santa muerte, nuestro destino inevitable.